Su objetivo como marca es redefinir la cocina francesa en un nuevo concepto de tapas francesas. Por ello, podemos definirla en 3 adjetivos: elegante, atrevida y moderna.

Estas cualidades me hicieron elegir una fuente display sans-serif y modificar su diseño ajustando el grosor de las esquinas en algunas de sus letras. Y para darle más personalidad al logotipo, cambié su Y por una en forma de copa de vino para darle más originalidad destacando uno de sus productos estrella.

Como complemento a esta tipografía utilizamos una fuente monoespaciada para darle un toque diferente pero elegante como fuente secundaria para el cuerpo de texto.

También elegí una paleta de colores neutros con colores complementarios que recuerdan a los colores de los vinos blanco y tinto, dando así una sensación de ambiente sofisticado y acogedor.